El aumento del ritmo de vacunación en todo el mundo y el fuerte descenso de la incidencia de casos de COVID-19 vaticinan una rápida recuperación de la actividad económica y, en especial, del turismo global. El sector, uno de los más castigados durante la pandemia, se prepara para la reactivación de la movilidad internacional y el aumento de viajeros durante los meses de verano.
Hasta 2019 el sector encadenaba 10 años seguidos de crecimiento cerrando 2019 con 1.500 millones de llegadas de turistas internacionales, un 4 % más que el año anterior según la Organización Mundial del Turismo. Todo apunta a que esta tendencia se mantendrá en la era poscovid debido a varios factores que lo convierten en uno de los mejores sectores para invertir este año.
1. Aumento del número de turistas y de su gasto efectuado
Naciones Unidas estima que para 2050 el mundo contará con una población de 9.700 millones de personas. Un aumento que coincide con el crecimiento del porcentaje de población mundial que puede considerarse clase media, esto es, clase consumidora. Este proceso es especialmente intenso en los países emergentes (con China e India a la cabeza). Un mayor poder adquisitivo supone un mayor número de turistas y un mayor gasto en todas las fases del viaje. En el período 1995-2018 el crecimiento del PIB mundial ha sido del +3,6% anualizado, mientras que el número de turistas internacionales ha crecido en un +4,3% anualizado y su gasto efectuado en un +5,6% anualizado. Es una actividad que crece más que el PIB Mundial.
2. Los nuevos viajeros Z
Otro de los factores son los cambios de hábitos y preferencias que detectamos en las generaciones más jóvenes, que se decantan principalmente por el turismo internacional. Efectúan más viajes totales por año que la generación de Baby Boomers así como un mayor porcentaje de viajes internacionales. Según datos de Hosteltur, en 2019 los integrantes de la llamada Generación Z, aquellos que tienen entre 16 y 25 años, gastaron una media de 641,3€ al año en sus salidas. Aunque sigue lejos de la media española (1.078€), es un 28,7% superior a la del ejercicio anterior.
Todo apunta a que esta nueva generación, acostumbrada a realizar más viajes a lo largo del año, irá aumentando su inversión a medida que se vaya incorporando al mercado laboral y aumente su poder adquisitivo.
3. Resiliencia ante las crisis económicas
Si algo ha demostrado el turismo global es su resistencia en los contextos económicos adversos. Concretamente, sólo le bastaron dos años para recuperar el ritmo de crecimiento previo a la crisis financiera de 2008, mientras la economía global permanecía en una profunda recesión. En 2010 el número de viajeros internacionales, 949 millones, superó a los 927 millones de 2008.
Durante la crisis sanitaria, las empresas del sector han demostrado su resiliencia financiera adaptándose al periodo de inactividad y sólo unas pocas han recurrido a una ampliación de capital. Si la recuperación fue rápida en la crisis anterior, esta vez lo será aún más con la tasa de ahorro de los hogares disparada tras los meses de confinamiento.
4. Buen comportamiento de los distintos actores
Uno de los valores del sector turístico, que lo convierte en una apuesta segura para el inversor, es su nivel de diversificación. El turista global efectúa un gasto que va mucho más allá de aviones y hoteles. En toda la cadena de valor intervienen empresas de reservas, aeropuertos, maletas, autopistas, cruceros, coches de alquiler, autocaravanas, buscadores de ofertas, medios de pago electrónicos, alimentación, etc.
Antes de la pandemia, el sector representaba un 12,4% del PIB en España y, a pesar del impacto de la crisis sanitaria, está previsto que todos los subsectores recuperen la actividad plena entre 2021 y 2024.
5. Tendencia alcista en bolsa
La fuerte subida de las cotizaciones, desde los mínimos registrados en marzo de 2020, demuestran la recuperación del sector, aunque todavía están lejos de reflejar su verdadero valor. Es por eso que ahora se abre una oportunidad única de inversión en empresas con un gran potencial alcista. El racional de largo plazo del sector se mantiene intacto tras la pandemia. Las experiencias del viajero no tienen sustituto tecnológico alguno.
Conozca nuestro fondo especializado en turismo global
GVC Gaesco creó en 2014 el fondo de inversión GVC Gaesco 300 Places Worldwide*, en el que invertimos en aquellas empresas que prestan sus servicios en los 300 lugares más visitados por el turismo global. Hasta diciembre de 2019, había reportado una rentabilidad media anualizada del 9,5%. El patrimonio del fondo ha pasado de 40 millones antes de la pandemia a los 150 millones de € a fecha de marzo de 2021. Y esto es posible porque el racional del turismo sigue intacto: no hay tecnología que sustituya el deseo de experimente las sensaciones del viaje.
Entre los sectores con más peso en el índice están los hoteles, aerolíneas, aeropuertos y reservas, pero también invertimos en compañías de cruceros, casinos, autocaravanas o parques temáticos. Entre las principales posiciones del fondo, con más de un 5% de la cartera, destacan Booking, Ryanair, Meliá Hotels, Carnival, Hilton y Accor.
En la escala de la CNMV del 1 al 7, este fondo cuenta con un nivel de riesgo de 7.