Vuelta a la senda alcista en los principales indicadores bursátiles mundiales.
En una sesión en la que no ha habido datos macroeconómicos importantes de relevancia para los inversores, el protagonismo lo han tenido, una vez más, los bancos centrales. Si en la semana anterior el protagonista fue el banco central europeo, en esta ocasión ha sido el Banco Central de Australia rebajando sus tipos de interés a mínimos históricos, quedando en el 2.75%.