Manuel Villalba. Director de Renta Fija
A menudo se cree que la inversión en la Renta Fija no presenta riesgos, pero esto no es así. A continuación analizo los principales riesgos asociados a esta clase de activos:
- Riesgo de Crédito: Éste es el principal riesgo asociado a los bonos, y es que el emisor no cumpla su obligación de pago, ya sea de los intereses o del principal al momento del vencimiento. Para evitar dicho riesgo, los bonos incluyen garantías del emisor sobre el cumplimiento de obligaciones. Asimismo, la calificación de las emisiones por parte de las agencias de rating ofrece a los inversores otra herramienta para gestionar la cartera de bonos, asumiendo el riesgo que su perfil inversor tolere.
- Riesgo de Reinversión: Otro de los riesgos de los bonos es que haya cambios en el nivel general de tipos de interés. Los bonos pagan intereses que pueden ser fijos, flotantes, indexados o pagables al vencimiento. La mayoría de los bonos incluyen un tipo de interés que se mantiene fijo hasta el vencimiento y la amortización del capital. El cupón o tipo de interés a pagar se expresa como porcentaje del valor del capital del bono. Por lo tanto, si se asiste a un escenario de cambios en los tipos de interés, puede darse el riesgo conocido como riesgo de reinversión, que supone la incapacidad para reinvertir los cupones recibidos al mismo tipo de interés que la rentabilidad a vencimiento que proporciona el bono (en el caso de bajada de los mismos).
- Riesgo de Tipos de Interés: Normalmente existe una relación inversa entre los tipos de interés y los precios de los bonos, es decir, cuando los tipos de interés aumentan, los precios de los bonos en circulación caen, y cuando los tipos de interés caen, los precios de los bonos en circulación aumentan. Esto es conocido como Riesgo de Tipos de Interés. Los bonos con mayor duración suelen ser mas sensibles a los cambios en los tipos de interés que los bonos de corta duración puesto que los tenedores están expuestos al riesgo durante un periodo mayor.
- Riesgo de Mercado: Otro de los riesgos asociados a la inversión en bonos es el de la rentabilidad por movimientos de precios durante el tiempo de tenencia del título, y este riesgo se denomina riesgo de mercado. Si se compra un bono emitido a la par y se mantiene hasta su vencimiento, suponiendo su amortización a la par, la rentabilidad simplemente vendrá por los pagos de los cupones durante la duración del bono, Pero si el bono no se compra a la par o no se mantiene hasta su vencimiento, su rentabilidad vendrá determinada por la diferencia entre el precio de compra y el precio de venta en el mercado, generando una ganancia o perdida de capital.
Podemos encontrar opciones de inversión interesantes dentro de la Renta Fija o, cuanto menos, emisiones que se adaptan al entorno de tipos de interés
Existe una amplia variedad de emisiones de Renta Fija que ofrecen al inversor alternativas suficientes para personalizar las inversiones según sus objetivos financieros, sus necesidades de ingresos y su aversión al riesgo. A continuación se enumeran algunas propuestas:
- Dada la actual situación de posible subida de tipos en el medio plazo, los bonos con tipos fijos pueden perder atractivo si el nivel general de tipos de interés aumenta. Por ello, los emisores emiten bonos de tipos de interés flotantes que se ajustan según los tipos dominantes en el mercado, conocidos como Bonos de Interés Variable o Flotantes.
- Los Bonos Indexados ajustan el pago inicial de intereses y de la amortización de capital según la tasa de inflación, y resultan de especial interés si ésta varía.
- El Bono Cupón Cero merece una especial atención. Se trata de un bono sin pagos periódicos de interés donde el inversor recibe a vencimiento el capital y el interés compuesto acumulado durante la duración del bono. Se suele vende con descuentos sustanciales respecto a su valor nominal.
La diversificación de los bonos en una cartera es fundamental para gestionar los riesgos asociados a ellos. Una cartera diversificada podría incluir:
- Bonos de distintos emisores para protegerse contra el peligro de que cualquiera de ellos sea incapaz de afrontar sus obligaciones por los pagos de intereses y de capital.
- Distintos tipos de bonos. Contar con Bonos Gubernamentales, de Agencias Internacionales, Corporaciones y otros emisores es una buena medida para protegerse contra la posibilidad de pérdidas o de default de uno de ellos.
- Bonos con diversos vencimientos para minimizar el riesgo de movimientos adversos en los tipos de interés que puedan perjudica.
Así pues, una buena diversificación puede proporcionar al inversor estabilidad en su cartera de Renta Fija, rentabilidad y protección frente a posibles movimientos de tipos de interés y de la tasa de inflación.