Juan José Berrocal. Analista
El mercado de bebidas energéticas se ha significado en estos últimos años por dos vertientes que nos enfrentan ante un dilema:
- Aprovechar la oportunidad de sumarnos a un mercado que se encuentra en un crecimiento constante. Prueba de ello es que las ventas en Estados Unidos, exceptuando los canales habituales, fueron en el año 2012 de 8.560 millones de dólares y se esperaalcanzar los 12.750 millones para el año 2016
- O bien, por el contrario, analizar los problemas legales derivados de las dudas acerca de la salubridad de este tipo de bebidas.
Tras el fallecimiento de un adolescente en el año 2011 debido a la ingesta “abusiva” de estas bebidas, se desató una campaña muy feroz contra el sector. Incluso se llegó a plantear la posibilidad de prohibir el consumo a niños y adultos en la ciudad de Chicago, con el consiguiente reflejo en el comportamiento bursátil, francamente negativo, de este tipo de compañías en bolsa como Monster Beverage Corp., y que aun quedaría pendiente de recuperar en gran medida.
Podemos tener algo claro, y es que la industria se enfrenta al desafío de contraatacar con campañas que devuelvan gran parte de la confianza perdida.
Las bebidas energéticas son un producto cuya intención final es la de aumentar la energía, resistencia y rendimiento físico. El publico objetivo en su gran mayoría es la población joven. El gran problema estriba en el consumo responsable y con ello, la tolerancia o no a la cafeína, principal ingrediente y que puede acarrear en aquellas personas con problemas cardiovasculares, renales o hepáticos algún que otro serio percance.
Lo anteriormente comentado ha obligado al sector a intentar introducir ingredientes más naturales como las frutas y verduras, que intentan identificarse con un estilo de vida más saludable, ofreciendo una gran oportunidad de crecimiento, que de algún modo, pueda atraer a nuevos consumidores, siendo algunos de ellos de mayores de edad.
La competencia en el sector es feroz. Podemos destacar, además de nuestro protagonista Monster con una cuota de mercado mundial del 37%, a Red Bull, número uno con una cuota cercana al 42%. Tras estos dos gigantes destacaríamos a una marca como Rockstar del grupo Pepsi y otras menores, como Burn, Xs o Battery.
Hace un año aproximadamente Monster fue objeto de rumores acerca de un posible interés por parte de Coca Cola por hacerse con el control de la compañía, operación que finalmente no se llevó a cabo.
Uno podría preguntarse por qué del interés sobre Monster y no por la de su rival, Red Bull. Quizá la respuesta sea porque Monster Beverage ofrece un mayor mix de producto, con una estrategia de expansión más agresiva con potencial de crecimiento en mercados como India, Eslovenia, Perú, Chile, Corea, Singapur, Rumania, etc. y porque las ventas, fuera de EE. UU. ofrecen buenos resultados ejercicio tras ejercicio, como lo demuestra el hecho que los ingresos en el año 2007 suponían un 5.4% del total frente a un 20,2 % del pasado 2012.
Desde el lado operativo, sugerimos la compra de Monster Beverage Corp. (Nasdaq, MNST) con objetivo en el rango entre 64,05 $ y 73,25 $.