Actualidad en los mercados

La amenaza de los tipos bajos

Las bolsas suben por los excelentes beneficios empresariales y bajan por los tuits de Trump. Afortunadamente para las bolsas, los primeros persisten, mientras que los segundos tienen lo que se denomina un impacto marginal decreciente, es decir cada nuevo tuit influye menos que el anterior.

Las bolsas siguen subiendo amparadas por unos beneficios empresariales muy robustos y globalizados. Mantener la bonanza bursátil de la última década en los próximos años pasa por evitar que se generen burbujas de activos, es decir por subir los tipos de interés hasta sus niveles equilibrio.

Lo malo no es que los tipos estén a cero, sino que lo estén con inflación, y por tanto que los tipos de interés reales sean negativos. Si esta situación persiste en el tiempo las burbujas de activos serán inevitables, y su hipotético estallido, será potencialmente problemático para las bolsas. En otras palabras, para que persista la buena salud bursátil durante muchos años más, los tipos de interés deben normalizarse cuanto antes. No subir los tipos de interés no es un aliado para las bolsas como alguien pudiera pensar, sino todo lo contrario, es su principal amenaza a medio plazo.

Decía recientemente un ex-ministro tailandés en una conferencia que si bien el siglo XIX había sido liderado por los europeos y el siglo XX por los americanos, el siglo XXI lo iba ser por los chinos

Quizás la voluntad China sea más certera que su resultado final. El liderazgo económico norteamericano se ha sustentado, además de otros factores, en su superior maestría en finanzas. La hora de la verdad en China será cuando se enfrente a su primera crisis económica. Pese a que con un crecimiento actual del 6% no se vislumbra aún, ese será su auténtico Día D.


Artículo publicado en La Vanguardia del domingo, 08 de diciembre de 2019