Antoni Bellfill. Director de Gestión de Patrimonios
Nuestro equipo presentaría un ofensivo 4-3-3.
Portería
La portería estaría ocupada por EON, eléctrica de referencia alemana, que durante los últimos años ha sufrido una importante restructuración a raíz del posicionamiento alemán respecto a la energía nuclear. Sus sólidos fundamentales, su interesante dividendo (3,31%) así como los elevados descuentos que presenta sitúan al valor como un candidato ideal a ocupar el puesto de cancerbero. Un portero que, debido a su potencial de revalorización, puede impulsar el equipo desde atrás, un portero “capaz de jugar con los pies”.
Defensa
La defensa estaría compuesta por cuatro valores nacionales con elevados dividendos: BME, Telefónica, Red Eléctrica y Enagás.
Centrales
Nuestros dos centrales serían BME y TEF. Dos perfiles diferentes capaces de resistir un entorno hostil.
BME, con una interesante posición de caja neta, con un dividendo del 6,13% y con la posibilidad latente de ser objetivo de una operación corporativa debido a su tamaño y posicionamiento, ocuparía la posición de central más expeditivo. En el caso particular de Telefónica, dada su cotización actual nos ofrecería la capacidad de sumarse al ataque en caso de necesidad sin renunciar a la seguridad de un dividendo actual del 5,36%. En los últimos diez minutos, Telefónica podría desarrollar el papel del central que se suma al ataque con la intención de descolgar y rematar balones aéreos.
Nuestros laterales estarían ocupados por REE y ENG. Dos valores con riesgo regulatorio pero que en el entorno actual de tipos son una excelente alternativa para aquellos inversores más conservadores que sin renunciar al mercado de renta variable quieran percibir dividendos por encima del 5%. Así pues, hablaríamos de dos laterales con capacidad para recorrer la banda y dar profundidad al equipo.
Medio campo
El eje del centro del campo se compone por Inditex, BMW y Boskalis.
La brújula de este once no podía ser otro que Inditex. Este mediocentro destaca por su capacidad de leer a la perfección el tempo del partido y por su habilidad de llegar desde segunda línea.
La distribuidora española sigue siendo la cadena de referencia entre sus competidores gracias a su modelo de negocio y a la continua innovación que está llevando a cabo en áreas de negocio cada vez más estratégicas como es el canal online. Su calidad se deja ver en la continua generación de caja y la capacidad de mantener sus márgenes en entornos cada vez más competitivos. A ello hay que sumarle su capacidad de llegada – como “falso 9”- pues sigue mostrando grandes oportunidades de crecer a nivel global, contribuyendo continuamente en el juego ofensivo del equipo.
Un poco más adelantada se posiciona la Alemana BMW. Aunque por veteranía no requiera de gran presentación, hablamos claramente de un medio centro ofensivo de carácter fuerte y con grandes aptitudes para sacar la pelota jugada.
Naturalmente hablamos de una posición que recibe mucha presión para cortar el juego colectivo del equipo. Ejemplo de ello podrían ser las medidas proteccionistas aplicadas por el actual presidente de EEUU. Sin embargo, creemos que el mercado ya lo ha descontado en precio, dejándolo en una zona de entrada atractiva.
No hay que olvidar que la compañía automovilística sigue mostrando resultados firmes a nivel de ventas en los últimos años. Si bien lo que destacamos del valor es su focalización en el devenir de la automoción como son los coches eléctricos y autónomos. En este campo, la compañía germana se sitúa en muy buena posición para estar en la cabeza de esta disrupción tecnológica.
Completando el triángulo tenemos a Boskalis, compañía que opera a nivel global en las actividades de drenaje e infraestructura marítima (56% ventas), energía offshore (41% ventas y donde obtiene los mayores márgenes) y remolque de embarcaciones, entre otros servicios.
La holandesa actúa como volante, eligiendo el momento adecuado para combinar un último pase.
En los últimos años se ha visto penalizada por la baja actividad en la que ha estado inmersa el sector. Como cualquier “late cyclical”, se ve beneficiada más tarde en el tiempo de periodos de expansión económica a diferencia de aquellas que son puramente cíclicas. Por tanto, es de gran conveniencia aprovechar la parte baja del ciclo (actividad) para entrar en el valor.
Lo importante es que el outlook que presenta la compañía es positivo, mostrando un aumento en la cartera de pedidos en el área de drenaje, que recordamos que es la principal vía de ingresos. Por tanto, el hecho de que su cotización se sitúe en mínimos de los últimos 6 años junto con el outlook de recuperación, parecen indicar que este jugador ha madurado suficiente la jugada como para dar un auténtico pase de gol.
Delantera
Por último presentamos el tridente ofensivo de este once de gala, formado por Santander, Arcelormittal y BBVA.
La buena tónica mostrada en los últimos trimestres, con un incremento del +17% de las ventas “year to year”, abalan a Arcelormittal como nuestra punta en ataque. Junto con unas condiciones de mercado favorables, una demanda fuerte y unos márgenes del acero sólido, la acerera sigue estando en boca de la mayoría de analistas como un valor a tener en cartera.
Con un upside medio del +30%, los dos bancos Españoles de referencia no podían faltar en este once.
Uno de los extremos está ocupado por Banco Santander. La principal entidad financiera Española sigue mostrando su capacidad de crecimiento tanto a nivel nacional como a nivel internacional. Es esta diversificación geográfica la que permite al banco dirigido por Patricia Botín mejorar en resultados gracias a mejoras sustanciales en los rendimientos en el área de Iberia y en el resto del mundo.
Más de lo mismo le pasa a BBVA. La entidad dirigida por Francisco González presentó unos resultados del 1Q mejores de lo esperado por el consenso de analistas gracias al buen comportamiento de todas las áreas de negocios.
No hay de dejar de lado que tras las caídas experimentadas por las tensiones geopolíticas en Italia y en menor medida en España, estos valores están cotizando por debajo de 1 vez su valor contable. Concretamente en 0,81x y 0,89x.
Sin embargo, uno de los puntos fuertes a destacar es su política de remuneración al accionista, con rentabilidades por dividendo del 4,63% y 4% respectivamente a precios actuales, con un bono español a diez años que renta un 1,33%.
Por tanto, hablamos de valores sólidos en ataque y con capacidad de crecimiento que a su vez, nos compensan con retribuciones muy atractivas.